La miel es una sustancia natural producida por las abejas a partir del néctar de las flores a la que, desde hace una eternidad, se le ha encontrado diversos usos.
A la vista la miel es dorada y tiene una consistencia viscosa, su sabor es dulce, constituye una gran fuente de energía y contiene los mas variados nutrientes.
Esta particular dulzura rica en nutrientes, aporta también azúcares de fácil absorción, glucosa y fructosa, que en instantes proporcionan vitalidad a personas con dificultades.
Cien gramos de miel ayuda a personas con necesidades energéticas como niños, deportistas y ancianos, entre otros, con poco aporte calórico -unas 300 calorías-.
La miel es un alimento apto para diabéticos, en pocas cantidades pueden usarla incluso las personas a dieta de adelgazamiento `pero es preferible no extender su uso en bebés por la presencia de bacterias.
Como la miel puede usarse en la cocina tanto como en la pastelería, puede combinarse con carnes, usarse en guisos e incluso utilizarse como aderezo dulce en recetas saladas. Lo que hay que tener en cuenta es cómo usar la miel ya que lo ideal es que conserve todos sus nutrientes.
Para cocinar es recomendable comprar mieles producidas de forma artesanal y descartar las industriales y para que se mantenga fresca por más tiempo, debe guardarse en tarros cerrados y lejos de la humedad y la luz.
Aquí va una receta de muslos de pollo a la miel para degustar una plato diferente.
Ingredientes: 4 muslos de pollo; 25 gr. De mantequilla; -50 gr. De miel; Harina; Nuez moscada; Aceite de oliva; Pimienta; Sal
Elaboración: Primero hay que preparar los muslos de pollo, pasando cada muslo por harina y sellándolos en una sartén en la que se agregará un buen chorro de aceite caliente.
Una vez que la carne de pollo quedsellada por ambos lados, la se retira y se coloca sobre una bandeja de horno.
Realizado este paso, se enciende el horno a 180ºC y mientras se calienta se empieza a preparar la salsa de miel que aderezará los muslos de pollo a la miel.
En un recipiente se coloca la manteca a derretir y una vez que está líquida, se añade la miel, se sazona, se agrega una pizca de pimienta y otra de nuez moscada y pasa al siguiente paso.
La salsa previamente realizada se coloca al fuego hasta que comience a hervir y en ese momento se retira para verter sobre los muslos de pollo que se habían dejado colocados en la bandeja.
Esta preparación, los muslos de pollo a la miel, se colocan en el horno durante 45 minutos, abriendo cada 15 minutos para girar los trozos de pollo y controlar que queden bien impregnados por la miel.
Al final del tiempo estipulado se retira la preparación y se presenta en una fuente con acompañamiento a gusto.
Bon Apetit!